A propósito de la sanción de la Ley de Fomento de las Exportaciones No Petroleras este miércoles, el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, recalcó que con esta norma se protege a los grandes y pequeños exportadores, y Venezuela apunta hacia su crecimiento económico.
Resaltó además que el parlamento nacional está contribuyendo con el plan económico para devolverle al país el bienestar que le fue robado a través de las sanciones y el bloqueo.
“Todos estamos trabajando y participando, y a nadie se le pregunta cómo piensa y por quién vota. Solamente todos estamos empeñados en devolverle a Venezuela la tranquilidad, la normalidad y, sobre todo, el bienestar que nos robaron esos piratas, esos corsarios que contribuyeron a la agresión del bloqueo y de las sanciones”, dijo el presidente del legislativo.
Comunicó además su orgullo al escuchar en la plenaria a los diputados Nicolás Maduro Guerra y Oscar Ronderos, “esto tiene un efecto histórico, de cuándo acá iba a ocurrir que Venezuela y su Asamblea Nacional iban a aprobar una verdadera Ley de Exportaciones No Petroleras, pero de verdad, porque es una petición de empresarios, grandes, pequeños, emprendedores, que ya quieren arrancar a exportar”.
Rodríguez destacó que Venezuela hoy día tiene la inflación más baja en 39 años, la moneda más robusta del continente, «tenemos la economía que más crece en este continente y sobre todo tenemos un nivel de producción en rubros distintos que nos hace más soberanos, independientes y sólidos, un país que puede producir los alimentos que se come, los vestidos que se pone, la tecnología que necesita y hacia allá vamos».
Asimismo, subrayó que la mayor fortaleza de la economía venezolana se convirtió en la mayor debilidad «cuando nos bloquearon, cuando jugaron a la destrucción de nuestro principal ingreso, que dependiendo, casi de forma exclusiva del ingreso petrolero nos ponía a merced de cualquier ataque, generando las graves consecuencias que se suscitaron en nuestra nación», dijo.
Indicó que el presidente Nicolás Maduro ha dicho en varias oportunidades que lo peor ya pasó y que es una realidad que se está constatando en las calles de Venezuela, «en el proceso paulatino e incesante de recuperación del ingreso, del estado de bienestar, de la capacidad de consumo, pero de manera muy importante en la construcción de un nuevo modelo económico y productivo comunitario».