El embajador permanente de Venezuela en la ONU, Samuel Moncada, fue elegido vicepresidente de la Asamblea General por aclamación y sin votación», en representación de América Latina y el Caribe.
Moncada resaltó, en su cuenta X, que Estados Unidos (EE.UU.) fue el único en oponerse a la elección de Venezuela por «reconocer a un gobierno títere que intenta apoderarse de la empresa petrolera Citgo», señalando que «para eso sirven los agentes locales de Estados Unidos».