El presidente Nicolás Maduro desde la clausura del Congreso Mundial contra el Fascismo, Neofascismo y Expresiones similares, advirtió que las redes sociales juegan un papel determinante para infectar de odio, intolerancia y violencia a importantes sectores de la población y así poder generar desestabilización en la nación.
“El campo de batalla no fue la economía, como si lo fue muchos años cuando disparaban los precios de los alimentos al pueblo venezolano o como cuando hacían mil maniobras contra el sistema cambiario, y en el campo de batalla no le permitimos que fuera la economía», subrayó el mandatario.
«No se puede creer en una sola palabra del imperio norteamericano», alertó el presidente al referirse a la inconsistencia del país del norte, en el marco de los procesos de diálogo procurados por Venezuela y la solicitud de cese de las conspiraciones.
Asimismo, añadió que hoy el campo de batalla fue el campo de las mentes, de la comunicación, «donde las redes sociales jugaron y están jugando el papel decisivo determinante para infectar a importantes sectores de la población de odio, intolerancia, violencia y antivalores”.
Maduro dijo que la extrema derecha usó el proceso electoral, las libertades públicas y las garantías para por debajo montar una maquinaria de fuerzas de choque con criminales que tuvieron su máxima expresión el 29, 30 y 31 de julio.
«Venezuela le vio la cara al demonio del fascismo y demostró en perfecta unión cívico-militar-policial, que estaba preparada para esa sorpresa, porque en 48 horas se restableció la paz, la armonía y tranquilidad de todo el país”, expresó.
El jefe de Estado denunció que han enfrentado una nueva «agresión internacional» y un «brote fascista» que tiene como objetivo perjudicar a la ciudadanía del país.
Indicó que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y la Administración de Control de Drogas (DEA), ambas instituciones estadounidenses, hicieron una operación para usar los comicios del 28 de julio para causar violencia en Venezuela.
“El gobierno de los Estados Unidos, la CIA y la DEA, como lo hemos venido denunciando, y hoy tenemos más pruebas que nunca que se darán a conocer en su momento, diseñaron una política para utilizar este proceso electoral y llevar a cabo una operación multidimensional contra Venezuela. Eso fue paralelo a los procesos de negociaciones”, dijo.
«El fascismo jamás llegará al poder político en Venezuela», subrayó el mandatario, quien además rindió un sentido homenaje a las mujeres y hombres mártires victimas de esta ideología.
Igualmente sostuvo que «un gran movimiento mundial antifascista está naciendo en Caracas».