En un comunicado difundido por el Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno de Venezuela rechaza categóricamente las declaraciones del presidente de Paraguay, Santiago Peña, «quien, ignorando el derecho internacional y el principio de no intervención, reincide en una práctica fracasada que recuerda las fantasías políticas del extinto Grupo de Lima con su ridícula aventura llamada Guaidó».
El documento agrega que estas acciones representan una reedición de estrategias sin sustento político, jurídico ni social, que han demostrado su rotundo fracaso. «Es lamentable que gobiernos como el de Paraguay sigan subordinando su política exterior a los intereses de potencias extranjeras, promoviendo agendas destinadas a socavar los principios democráticos y la voluntad de los pueblos libres», reza.
En este contexto, Venezuela ha decidido, en ejercicio pleno de su soberanía, romper relaciones diplomáticas con la República del Paraguay y proceder al retiro inmediato de su personal diplomático acreditado en ese país.
«El Gobierno Bolivariano reitera su compromiso con la defensa de la democracia, la paz y la autodeterminación de los pueblos, principios esenciales de la Carta de las Naciones Unidas, y reafirma que ninguna bufonada instruida desde el fascismo internacional logrará doblegar la voluntad de un pueblo firme en la construcción de su propio destino», expresa.